lunes, 16 de octubre de 2023

6) El pasado chipriota: riqueza arqueológica y el monasterio de Kikkos

 

Kikkos es el principal monasterio de la isla, pero es algo más que un centro espiritual. Su actividad como impulsor y difusor del nacionalismo grecochipriota, ejerciendo como tal en las luchas contra los ocupantes, fueran turcos o británicos, lo ha convertido en un símbolo. Situado en el camino de Troodos a Nicosia, a 18 kilómetros del monte Olimpo, disfruta de un paisaje de montañas boscosas.

Kikkos nos pillaba un poco alejados de nuestra primera casa, en Peyia, a casi 90 kilómetros, pero decidimos hacer la excursión. Transitamos por carreteras de montaña en un recorrido que nos ocupó dos horas y media. Las carreteras estaban en buen estado, asfaltadas y con pintura señalizadora, pero su estrechez, las curvas constantes y las piedras en la vía por pequeños derrumbamientos obligaron a conducir con mucha atención.


A cambio, un paisaje de montaña verde y atractivo. Paisajísticamente es otro Chipre, nada que ver con las zonas costeras.


El acceso al monasterio es libre, claustro e iglesia, pero hay que pasar por taquilla para ver el museo, aunque con rebaja por tratarse de un grupo.


Aunque lo ignoramos casi todo del cristianismo ortodoxo y del nacionalismo griego de la isla, el recinto es agradable, está cuidado y  las terrazas cubiertas de sus patios lucen llamativos mosaicos. 


Donde encontramos textos en inglés nos enterábamos un poco, y en el resto solo podíamos entender lo que nos entraba por los ojos. De entrada, se desconoce el origen del nombre de Kikkos, se especula con que provenga de kokkos, un arbusto de la zona. Se le denomina real monasterio ya que lo fundó el arzobispo Nicéforo en tiempos del emperador bizantino Alejo I Comneno, que reinó a caballo de los siglo XI y XII. Nicéforo está enterrado en Kikkos.

Iglesia del monasterio, como todas con las paredes y techos saturados de imágenes y pinturas

Techos con frescos en los pasillos del recinto

Desde sus primeros tiempos el monasterio se esforzó en preservar y potenciar la lengua griega y la propia historia, de la isla y del recinto.


Durante la etapa turca sirvió de refugio a numerosos cristianos, tanto en el monasterio como en las diferentes dependencias que mantenía en otros lugares de Chipre. Numerosos jóvenes estudiaron en Kikkos, e igualmente contribuyó a fundar escuelas en distintas localidades. Prueba de su influencia es que monjes de Kikkos ocuparon posiciones de liderazgo en la iglesia ortodoxa fuera de Chipre.


El liderazgo sociopolítico de Kikkos se mantuvo durante la reciente ocupación turca, hace 60 años, ofreciendo refugio a desplazados por el ejército turco y apoyando económicamente a las fuerzas griegas. En el momento actual se encuentra centrado en actividades de carácter espiritual.


Nuestra intención era visitar después la tumba del arzobispo Makarios, presidente de Chipre tras la independencia, que se encuentra por la zona, pero unas obras en la carretera de acceso nos impidieron el paso y, por otro lado, indisposición de uno de los viajeros nos llevó a regresar a casa antes de lo previsto.


Tumbas de los Reyes (Pafos)

Una de las riquezas de Pafos son las denominadas Tumbas de los Reyes, una enorme necrópolis que data del siglo III a.c., y que pese a su denominación son tumbas, pero no de reyes sino de altos funcionarios. Las ruinas de Nea Pafos, a las que pertenece este enorme cementerio, fue declarada Patrimonio de la Humanidad en 1980 e incluye el impresionante Sitio Arqueológico de Pafos que también visitamos y del que hablaremos unas líneas más abajo.  

Las tumbas de este enorme cementerio están excavadas en el subsuelo de roca caliza, un material relativamente sencillo de trabajar. De los estudios realizados se ha concluido que cada familia disponía de una tumba.


Se estima que se realizaron enterramientos hasta el siglo III d.c., con lo que su actividad se habría mantenido unos seis siglos. Se cree que también fue utilizado durante las persecuciones de cristianos para conseguir refugio y después, en la Edad Media, hubo asentamientos que modificaron su arquitectura original.

El recinto de las Tumbas de los Reyes está situado junto al mar y es enorme, con una serie de tumbas excavadas y recuperadas, visitables, y posiblemente en el subsuelo haya más.


Recorrimos el recinto protegidos del sol en la medida de los posible en una jornada con numerosos visitantes.


La investigación de este lugar se inició en 1738, cuando un viajero inglés hizo la primera descripción de la necrópolis. Poco después un aventurero español, Domingo Badia, dejo por escrito la visita a este cementerio. Pero no fue hasta 1870 cuando empezaron las excavaciones.


En la investigación se localizaron en las tumbas objetos de cerámica, lámparas, joyas de oro y monedas del siglo II a.c. El hallazgo de un horno de alfarería de la Edad Media y la modificación constatada en una de las tumbas sugieren su posterior utilización como viviendas.


Teniendo en cuenta el tiempo que estuvo en uso el camposanto no es de extrañar que haya tumbas muy diferentes en cuanto a diseño y decoración. Recintos cuadrados enormes de los que parten oquedades y otros en los que hay patios porticados con atrio y columnas. 


Realmente impresionan sus dimensiones y no extrañará que futuras campañas localicen más tumbas, en un recinto indudablemente con vistas magníficas.

Sitio arqueológico de Pafos


Este recinto arqueológico investiga y trata de poner al descubierto lo que fue la ciudad de Pafos. Pese a la importancia y grandiosidad de lo descubierto de aquella ciudad griega y romana, el proceso de excavación sigue en marcha.


Los mosaicos recuperados, muchos y en general en buen estado, son una parte fundamental del reconocimiento de este emporio arqueológico de visita obligada.


Las excavaciones han descubierto cuatro grandes villas romanas, y además un ágora, una basílica, un odeón y teatro y un lugar de curación.

Mosaico circular de la Casa de Teseo

Entre las villas localizadas destaca la que ha sido bautizada como Casa de Teseo, nombre adjudicado por un mosaico en su interior que representaba la batalla entre Teseo y el Minotauro. La residencia tiene unas dimensiones descomunales: 120 metros por 80.


Se estima que fue construida en el siglo IV a.c. y dos siglos después se convirtió en capital de la isla en lugar de Salamina, lo que explica sus dimensiones y grandiosidad.


Las excavaciones del recinto fueron dirigidas por un equipo polaco en 1965 y encontraron esculturas de Asclepio y Artemisa. También un tesoro de monedas de oro de Filipo III de Macedonia y Alejandro Magno.


Esta investigación de la Universidad de Varsovia ha seguido hasta fechas recientes, y en el proceso fue sacando a la luz villas romanas con suelos decorados con mosaicos.

Mosaicos romanos en la casa de Dionisios, con el mito de Poseidón y Amimone

La villa donde apareció el mosaico de la imagen superior fue muy rica, unos 2.000 metros cuadrados construidos de los que más de 500 están cubiertos con mosaicos, con escenas de caza, de época y mitológicas. Se le ha bautizado como Dionisios porque este dios aparece en varios de los mosaicos.


Con tranquilidad hicimos una visita a la mayor parte del recinto, que se encuentra bien organizado. Dadas sus dimensiones se tarda un buen rato.

Mosaico sobre Fedra e Hipólito con su perro


En 2020 comenzó un nuevo proyecto investigador en el que participan tres universidades polacas destinado a clarificar el modelo urbanístico de lo que fue un importante centro urbano.


El pasado romano y heleno de Kourion

Dentro de este chute clásico en Chipre no dejamos de visitar el parque arqueológico de Kourion, o Curio en la costa sur, a 14 kilómetros de Limasol. Es otro recinto enorme en el que han aparecido villas romanas, un teatro y diferentes dotaciones de una ciudad, incluyendo llamativos mosaicos. Al igual que Nea Pafos, está situada junto al mar, evidenciando la preferencia de aquellos antepasados tan cultivados por la costa como lugar de residencia.


Los mosaicos están protegidos por imponentes cúpulas para evitar los daños por inclemencias climatológicas o incluso por el sol, y unos pasillos permiten su contemplación con comodidad. Como era sábado y llegamos a una hora bastante temprana, pudimos recorrerlo con tranquilidad, casi solos en algunos puntos y escapando en la medida de lo posible del sol inclemente.


Mosaico de la Casa de Eustolios

La Casa de Eustolios fue un complejo residencial de finales del siglo IV y principios del V de la era actual, con seguridad una persona relevante. Alrededor de dos patios se sitúan todas las estancias y los baños termales, y destacan los mosaicos que cubren casi todo su pavimento.


El teatro data del siglo segundo a.c. y tenía capacidad para unos 3.500 espectadores.


Sin embargo, el teatro existente ahora es producto de la reforma romana del siglo II d.c. bajo el imperio de Trajano.


El ágora romana es una parte fundamental del antiguo recinto, con estructuras del siglo III d.c., pero construido sobre un edificio ya existente.


La básilica romana (siglos V y VI), la Casa de los Gladiadores (llamada así por los mosaicos con luchas de gladiadores), la Casa de Aquiles (por el mismo  motivo), son otros lugares destacados.


Y a 2,5 kilómetros de Kourion se encuentra el santuario de Apolo Hylates, que fue uno de los principales centros religiosos del antiguo Chipre, pero que no visitamos.


Se ha calificado el recinto como un "Balcón al mar", de forma muy acertadaCompletamos el recorrido a lo largo de la mañana con la finalidad de acercarnos después a Limasol.


Nosotros lo hicimos a pie, aunque hubo quien prefirió conocer lo que había sido Kourion desde el aire. El piloto tuvo que realizar varios intentos para despegar desde un acantilado al lado del recinto arqueológico a causa del viento. Después disfrutó, seguro, de Kourion, y posiblemente más del paisaje de esta zona costera.

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